Escapada increible, El Gran Cañon
Cuando pienso en lugares increíbles que he podido conocer, este siempre se me viene a la cabeza. Mi visita al gran cañón fue desde las vegas “una excursión que te puedes perder si visitas las vegas”. Cogí una avioneta y fui a visitar el gran cañón, justo cuando sales con la avioneta puedes observar una presa gigantesca la presa Hoover, es una presa de hormigón gigante ubicada en la frontera de Nevada y Arizona……
Luego cuando llegas a todas las montañas rocosas es una maravilla poder observarlas y ver esos increíbles socavones en la tierra, todo el paisaje es montañoso, puedes ver formas en las rocas que jamás imaginarias que existiesen y continuas divisando ese paisaje durante muchísimo tiempo y parece que nunca se acaba, resulta reconfortante e increíble poder hacerlo. Eso si, sí eres una persona que sufre de mareos o tiene vértigo es mejor no mirar durante muchísimo tiempo ya que correrás el riesgo de marearte. Nunca olvidare que durante el trayecto en avioneta algunas personas se mareaban y lo pasaban realmente mal, por lo tanto es conveniente ir preparado para el viaje.
Cuando llegas a el gran cañón del colorado puedes observar en la parte de abajo el río colorado, bueno realmente mas que poder observarlo con nitidez lo intuyes, la distancia desde los miradores es enorme y cuesta hacerse bien a la idea.
Cuando llegue a el primer mirador, me detuve durante un tiempo y me quede divisando en paisaje, luego puse la mente en blanco cerré los ojos y cuando volví a abrirlos me imagine que estaba como incrustado en una postal, la imagen era digna de ver una distancia de muchísimos kilómetros con un agujero gigante en la tierra donde no te podías imaginar que realmente lo que estabas viendo era real.
En 2007 se ha construido un mirador increíble que no he tenido la suerte de poder visitar, el precio son algo más de 50 €, pero según he leído experiencias resulta espectacular y parece que estas caminando por los aires, ya que el suelo es de cristal y sobresale 20 metros de la montaña.
Existen algunos lugares donde puedes comprar merchandising, pero personalmente ese tipo de sitios no me apasionan.
El peor momento es cuando llega el momento de abandonar el lugar, personalmente sentí una pena terrible, no me quería ir, en realidad no me creía lo que estaba viendo pero me estaba gustando muchísimo. Sentir esa brisa dando en mi cara mientras miraba al infinito era muy reconfortante y sentías una sensación de paz espectacular.